Ante el colapso de los establecimientos de salud y la poca capacidad de respuesta por la ineficiente gestión de los mismos, el doctor Manuel Montoya, médico infectólogo, sostiene que las pruebas rápidas y moléculares deberían ya pasar a un segundo plano en todos los hospitales a nivel nacional y se debe adoptar la atención y tratamiento primario de acuerdo a los cuadros clínicos respiratorios que un paciente presente por sospecha de COVID-19.